Cada uno de los seres humanos arrastra consigo los inmensos círculos de su existencia y las entrañas cálidas de otras personas, de las que salió como un gusano, y ahora se arrastra y lleva la pesada carga de su aguijón venenoso, y muerde y pica y come y devora, y lo devoran y lo han uncido a un carro y le pegan golpes de fusta sobre la cabeza, y todo gira en círculos de resistencia y hambre y de horror, y en medio de todo esto, la pintura es, por regla general, algo desconocido y superfluo. (El retorno de Filip Latinovicz, MIROSLAW KRLEZA)
ahí ya estaba hecho mierda, qué caripeta. si lo veía por la calle, corría.
ResponderEliminarcaripela
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